La Subdirección General de Proyectos y Obras del Departament de Territori ha comunicado que la prueba piloto iniciada el pasado mes de octubre —que reduce la velocidad máxima permitida a 70 km/h en horario nocturno en la C-31— seguirá activa durante más tiempo del previsto inicialmente.
Cada noche, entre las 22 h y las 7 h, la velocidad máxima continúa limitada a 70 km/h. Actualmente, en este tramo de la C-31 se puede circular como máximo a 80 km/h o a 100 km/h según la zona, por lo que la medida supone una rebaja significativa en determinadas franjas. El dispositivo también incluye controles específicos para garantizar su cumplimiento.
Según los Departamentos de Territori, Habitatge i Transició Ecològica e Interior, hasta el momento no se ha detectado ninguna afectación en la fluidez del tráfico, uno de los elementos clave para asegurar que la reducción de velocidad no genera impactos negativos en la movilidad diaria.
¿Por qué se prolonga la prueba?
La principal razón es reforzar la solidez del estudio acústico asociado al proyecto. Las administraciones consideran necesario disponer de un volumen más amplio de datos antes de elaborar conclusiones definitivas sobre la efectividad real de la medida en la reducción del ruido viario, especialmente relevante para los vecinos y vecinas de los barrios más próximos a la vía, donde las afectaciones acústicas del tráfico son más perceptibles.
Sin nueva fecha de finalización
Por ahora, Territori, Habitatge i Transició Ecològica e Interior no han fijado una nueva fecha de finalización. Cuando la tengan definida, será comunicada a los municipios afectados, entre ellos Castelldefels.
El estudio forma parte del conjunto de actuaciones para mejorar la calidad ambiental en el entorno de la C-31 y reducir el impacto sonoro en las zonas residenciales próximas. El Ayuntamiento seguirá realizando seguimiento del proyecto e informando a la ciudadanía sobre cualquier novedad.
